Paisajes Mineros / Valle del Caudal
Constituido por toda una cuenca hullera localizada en torno al río Caudal (afluente del Nalón), que integra a su vez dos sub-cuencas transversales entorno a los río Turón y Moreda, afluentes del Caudal, que han sido fundamentales en la historia minera de las cuencas. La minería se sintetiza aquí en dos grandes etapas, con elementos patrimoniales diferenciados: la minería de montaña y la explotación vertical y minería de cielo abierto. La empresa metalúrgica y minera Fábrica de Mieres y más tarde Hunosa, fueron las dos principales empresas protagonistas de la construcción de este paisaje.
Municipios afectados: Aller, Mieres, Morcín, Lena, Riosa y Santo Adriano Extensión: 956 Km2 Protección: Bienes de Interés Cultural: Pozo Santa Bárbara. Inventario de Patrimonio Cultural de Asturias: 11 pozos y/o minas incluidos en el Inventario en el primer trimestre del 2013. Espacios Naturales Protegidos: Paisaje Protegido de las Cuencas Mineras. Caracterización: El Caudal es un afluente del Nalón, pero la importancia y extensión de su cuenca le aporta identidad propia. Se trata de un espacio de valles muy diferenciados, todos ellos a partir de ríos tributarios del colector principal; cabe destacar el Riosa, San Tirso, San Juan, Valdecuna, Turón, Aller y Lena (Huerna y Pajares en su parte más alta). La caracterización de este paisaje minero, responde en gran medida, al resultado de la evolución de las técnicas industriales de explotación de los yacimientos de carbón, que han evolucionado siempre orientados en la búsqueda de la viabilidad económica. El principal reto para ello ha sido la superación de los condicionantes físicos que presenta este territorio (tanto para la explotación como para el transporte). Una de las principales características es la connivencia entre lo urbano y la minería. Los pozos se localizan en el fondo del valle junto a las áreas urbanas residenciales. Historia: La empresa impulsora de la industrialización en el Valle del Caudal fue Fábrica de Mieres. Su creación en la segunda mitad del siglo XIX propició la apertura de números grupos mineros para abastecer a esta fábrica siderúrgica. Durante, los siglos XVIII y XIX como ocurrió en el Valle del Nalón, la explotación del carbón se realizaba a través del sistema de minería de montaña. Sólo en la primera mitad del siglo XX se abren los primeros pozos verticales, siendo el de Santa Bárbara, en el valle de Turón uno de los pioneros en esta cuenca. El transporte del carbón fue uno de los retos por los que más se trabajó. La decisión en este caso fue en un principio la del ferrocarril, que llegó más tarde que en la vecina cuenca. En el año 1901, la compañía Ferrocarriles Vasco-Asturiana obtuvo concesión para construir y explotar dos líneas férreas: Oviedo – San Esteban de Pravia y Fuso de la Reina – Ujo. Entre las empresas que aquí tuvieron presencia destacan Hullera Española (valle del Aller), Hulleras del Turón (Valle del Turón), la sección minera de Fábrica de Mieres (Cuenca central del Caudal) y Minas Figaredo (Valle de Turón). Todas ellas tuvieron actividad hasta su integración en los años sesenta del siglo XX en la empresa estatal HUNOSA, que aglutinó a todas las empresas deficitarias. Sólo Minas Figaredo se mantuvo más tiempo independiente hasta su integración definitiva en HUNOSA, previa a su cierre. En la actualidad la cuenca mantiene activos tres pozos de extracción y un lavadero de los 11 pozos y 2 lavaderos que llegó a tener funcionando al mismo tiempo así como cientos de instalaciones e infraestructuras mineras relacionadas con la minería de montaña.
Extracción: Carbón
Como elementos de interés patrimonial del conjunto minero e industrial destacan:
Constituye un conjunto orgánico de elementos arquitectónicos e industriales formando un todo homogéneo de coherencia formal, a pesar de su evolución diacrónica, entre los espacios de trabajo (castilletes, casa de máquinas, grupo de cogeneración, ventilación, etc.) los dedicados a residencia de obreros y empleados así como las construcciones realizadas en beneficio de la comunidad (Economato). Santa Bárbara junto con el resto de los pozos de este valle constituye per se una unidad de paisaje minero con características propias derivadas de su propia evolución histórica. Exceptuando Minas Figaredo, la mayoría de las explotaciones del valle fueron iniciadas o explotadas, hasta su absorción definitiva por HUNOSA, por la empresa Hulleras del Turón. De ahí que el propio valle conforme ya desde finales del siglo XIX su propio sistema productivo industrial (extracción, transporte, lavado, selección y cribado…). A todo ello se le acompañan distintos elementos de promoción o patrocinio empresarial puestos al servicio de los trabajadores de Hulleras del Turón: hospitalillos, iglesias, escuelas, viviendas (cuarteles, viviendas unifamiliares…) diseminados por todo el fondo del valle. Enlace Google Earth: http://mineriaypaisaje.com/google/caudal/pozo_espinos.kmz
Localizado en el Valle de Turón, se trata del primer pozo vertical de este valle. También conocido como la Rebaldana, se construyó para atacar las capas de los grupos San Víctor y San Pedro. Su producción regular comenzó en 1926.
Del pozo vertical conservamos hoy las principales instalaciones que fueron restauradas y rehabilitadas recientemente, aún sin albergar aún un uso definido. Se trata fundamentalmente del castillete, símbolo del pozo con unos 25 metros de altura, repintado en rojo como nuevo símbolo destacado del patrimonio industrial y minero del valle; la sala de embarque, construida en 1955, cuyo diseño es atribuido al ingeniero Idelfonso Sánchez del Río; el basculador y cadena de arrastre, como instalación destinada a la circulación y volcado del carbón que salía en vagonetas para su transporte mediante cintas transportadoras; edificio de servicios múltiples, que acogía los baños, lampistería y enfermería; la casa de máquinas y compresores, como elemento tractor mecánico tanto para el funcionamiento del castillete como de los distintas herramientas y mecanismos que funcionan por aire comprimido; cobertizos para bicicletas, situados frente al pozo y donde los trabajadores colgaban uno de los medios de transporte más empleados por los mineros en el valle. Enlace Google Earth: http://mineriaypaisaje.com/google/caudal/pozo_san_jose.kmz
La historia de la minería asturiana y del Valle de Turón tiene en el Pozo San José uno de los conjuntos emblemáticos. En las primeras décadas del siglo XX el carbón explotado en galerías de montaña comienza a ser insuficiente, haciéndose necesario explotar capas por debajo del nivel del valle. En el valle de Turón esto ocurre en los años veinte con la preparación de Santa Bárbara y finales de los años cuarenta con la del Pozo San José.
El pozo San José es un paradigma del patrimonio industrial minero asturiano al conservarse en un mismo espacio vestigios de la minería del carbón, desde sus inicios a partir del laboreo en galerías de montaña, hasta la explotación mediante un pozo vertical. Es además un ejemplo destacado de la materialización de una determinada política empresarial, aplicada en este caso por Sociedad Hulleras del Turón.
Otros elementos ambientales con vestigios de la minería y con protección paisajística son:
Declarado Paisaje Protegido por Decreto 36/2002 este espacio cuenta con más de 100 km2 de extensión. El Paisaje Protegido de las Cuencas Mineras engloba las zonas altas de los valles de los municipios de Mieres, Langreo, Laviana y San Martín del Rey Aurelio en torno a Peña Mea (1560 m.), punto más alto del espacio protegido y una reducida zona del concejo de Aller.
Itinerarios Turísticos: http://mineriaypaisaje.com/valle-del-caudal-it/
Industrias Culturales: http://mineriaypaisaje.com/valle-del-caudal-ic/
Android: https://play.google.com/store/apps/details?id=com.duonet.Xacogeo&feature=search_result Iphone: https://itunes.apple.com/es/app/xacogeo/id424245465?mt=8
– Valle de Turón. Patrimonio Histórico de la minería (Web)
http://www.valledeturon.com/
– El Valle de Turón. (Web)
http://www.elvalledeturon.net/
– Ticchi España (Web)
http://www.ticcih.es/patrimonio-industrial-2/100-elementos-del-patrimonio-industrial-en-espana/
– Xacogeo (App)
App para redescubrir el Patrimonio Cultural e Industrial a lo largo de los caminos de Santiago del Norte de España. Descarga de la App en los markets de:
Comprende los valles entorno al río Caudal y sus afluentes. Constituye una de las dos grandes cuencas mineras de Asturias, distribuyéndose en sus inmediaciones varios pozos mineros. Consta de un total de tres tipos de paisajes
Macizos montañosos cantábricos
Suponen un auténtico murallón entre Asturias y León, donde las condiciones físicas se muestran muy determinantes en la configuración del paisaje. La agreste orografía de entorno hace que se presenten diferencias bioclimáticas ostensibles entre su cara asturiana, siempre húmeda (por no decir mojada) y la leonesa, mucho más seca, lo que determina cubiertas vegetales muy diferenciadas, con robles y hayas en la cara norte y rebollos y sabinas en la sur.
Ciñéndonos a la cara norte, que es la incluida en el paisaje a comentar, hayas (Fagus sylvatica), robles albares (Quercus petraea) y abedules se concentran a media altura y matorral y piedra desnuda en sus partes más elevadas.
Las áreas de mayor cota, que rebasan los 2.000 metros, ofrecen relieves donde la masividad del roquedo y la erosión glaciar y periglaciar dibujan un paisaje hasta cierto punto diferenciado entre la zona occidental, más intrincado, y la oriental, más tendido (en términos relativos) y, por tanto, con una mayor impronta humana, desde la ocupación tradicional del territorio hasta instalaciones del tipo estaciones de esquí.
En este tipo la presencia de minería carece de representatividad; y aun así se encuentra muy horadado, pero de mano de las infraestructuras de comunicación, ya sea a cargo del ferrocarril convencional, del túnel que empleará el tren de alta velocidad o la Autopista del Huerna.
Sierras y valles de la Cordillera Cantábrica
Son la prolongación del anterior tipo, si bien sus rasgos son menos vigorosos, de menor cota y con una presencia humana mucho más destacada.
Se trata de relieves diseccionados por unos ríos “impetuosos”, que salvan importantes desniveles con poco recorrido lineal, lo que les confiere una gran capacidad erosiva. El resultado es una serie de valles nítidamente definidos (Aller, Turón, etc.) con unas laderas de pendiente importante.
La ocupación humana tradicional deja señas muy nítidas de su relación con el sol, muy perceptible por la dirección aproximada E-W; así, la ladera de solana cuenta con la mayor parte de los asentamientos de población, circundados éstos de sus correspondientes términos agrarios. Por contra, la cara umbría queda reservada para la explotación forestal y las labores pecuarias estivales.
Sobre este tipo de paisaje fue muy habitual la minería de montaña u horizontal, pues la propia ladera se aprovechaba para iniciar galerías a diferentes alturas a través de lo que se conoce como una bocamina. Posteriormente, la explotación se llevó a los ejes de los valles por medio de pozos verticales, lo que supuso una mayor incidencia de la minería en el paisaje, con caracteres análogos a los que se comentarán en el próximo tipo de paisaje.
Este tipo de paisaje supone los espacios fronterizos entre este paisaje minero y el del valle del Nalón, en el que también se presenta.
Valles intramontañosos asturianos
Básicamente es la continuación de los anteriores, con caracteres relativamente parejos. Sin embargo, éstos ocupan la parte más baja y abierta de los valles de la Cordillera Cantábrica, lo que resulta muy perceptible en los valles de Turón y Aller, así como en los grandes colectores fluviales.
El calificativo de “intramontañosos” es buen reflejo de su orografía, con laderas también de pendientes importantes, si bien algo menos acusadas que en el tipo anterior; y, eso sí, la parte baja cuenta con una mayor sección, con cierta importancia de las vegas, únicos terrenos llanos del entorno.
Sobre este tipo la actividad minera ha sido capital; si bien también cuenta con numerosos ejemplos de minas de montaña, el pozo vertical es el modelo por excelencia, dibujando un skyline dominado por castilletes y una superficie ya no sólo cubierta por las instalaciones del propio pozo, sino también de las infraestructuras centrales que asisten a toda la cuenca, tales como los lavaderos.
Esta mayor actividad conlleva una mayor presencia de espacios residenciales urbanos. El modelo más repetido es de barriadas obreras a modo de cuartel, donde su función básicamente se limitaba al residencial con una nítida carencia de equipamientos que, en los mejores casos, se fueron incorporando posteriormente. Los mayores centros urbanos y la cabeza comarcal, Mieres, también se encuentran sobre este tipo de paisaje.
Macizos montañosos cantábricos
- Macizo de Peña Ubiña: Relieve muy vigoroso, que llega a alcanzar la cota de 2.411 metros en Peña Ubiña, donde cuarcitas y, sobre todo, calizas sobresalen a modo de cumbres rocosas angulosas sobre terrenos más romos ocupados por la actividad ganadera extensiva. Las formas glaciares y periglaciares son dominantes.
- Macizo de Casomera-Piedrafita: Cuenta con potente desnivel donde la erosión diferencial provocada por los ríos ha marcado su configuración; así se han desalojado materiales relativamente blandos, pizarras preferentemente, quedando la divisoria definida por una litología resistente, caliza y cuarcita. Sobre varias masas forestales bien definidas se intercalan numerosos términos agrarios correspondientes a pequeños asentamientos.
- Macizos de Fuentes de Invierno y Sierra de La Cuerna: Muy determinado por la estructura en cabalgamientos propia de la Región de Mantos, con relieves potentes, cumbres con caracteres glaciares heredados, gargantas sobre calizas y masas de haya bien conservadas.
Sierras y valles de la Cordillera Cantábrica
- Sierras y valles del interfluvio Nalón-Caudal: O más concretamente, del Alto Nalón y Alto Caudal, es una unidad compartida con el paisaje minero del Valle del Nalón. Cuenta con una alineación general SE-NW bien definida, con la siguiente sucesión: Sierra de Pelúgano, valle del Alto Aller, Cordal de Murias y Santibáñez , Río Negro, Sierra de Casomera. Si bien en esta última alineación existen varios ejemplos de minería, el área de referencia es el espacio fronterizo con la siguiente unidad descrita, así como con el siguiente tipo.
- Montes y valles entre Mieres y Sama: Es también una unidad compartida con el Valle del Nalón. Son valles de disección por excelencia, con gran presencia del castaño en sus laderas de umbría y que conservan caracteres y actividad agraria en la solana; sin embargo, la actividad minera cuenta con una potente impronta en determinadas áreas, tales como el valle medio del Aller o el alto valle del Turón, así como la presencia de varias explotaciones a cielo abierto entre el Samuño y Mieres.
Valles intramontañosos asturianos
- Cuenca de Mieres: Es el área más urbanizada, presidida por Mieres y con otras entidades destacadas como Moreda. Sin embargo, su configuración espacial difiere de un modo importante al encontrarse ésta repartida por varios valles. La presencia de elementos mineros es muy destacada, ya no sólo por pozos, sino también por otras instalaciones, tipo lavaderos. También cuenta con una importante implantación de actividades económicas que se extienden entre los núcleos de población. Cabe citar la potencia del cierre occidental que supone la sierra del Aramo.
- Valle del Alto Caudal: Supone el espacio existente entre la unidad anterior y los macizos montañosos, en un graduado camino hacia los paisajes montanos del Sur. Las alineaciones generales son de Sur a Norte. Cuenta con masas forestales bien conservadas combinadas con la explotación semiextensiva de la ganadería. Su repercusión minera es mucho menor que en las anteriores unidades. Pola de Lena es su núcleo principal.